De mi

Cuando estés mal
cuando estés solo.
Cuando ya estés cansado de llorar
no te olvides de mí
porque se que te puedo estimular.
Cuando me mires a los ojos
y mi mirada esté en otro lugar
no te acerques a mí
porque se que te puedo lastimar.
No pienses que estoy loco
es sólo una manera de actuar
No pienses que estoy solo
estoy comunicado con todo lo demás.
Por eso cuando estés mal
cuando estés sola
cuando ya estés cansada de llorar
no te olvides de mí
porque se que te puedo estimular.

Bolg, James Blog

¿Cuántas veces habremos querido ser James Bond, eh?
¿Cuántas veces habremos querido manejar esos autos imponentes?
¿Cuántas veces habremos querido tener licencia para matar (a unos cuántos zátrapas)?
¿Cuántas veces habremos querido usar esa tecnología espectacular?
¿Cuántas veces habremos querido ser ese héroe?
¿Cuántas veces habremos querido superar nuestros problemas sin más que esquivar balas o viajar conlgado del ala de un avion?
¿Cuántas veces habremos querido tener a esas minas no aptas para cardíacos rendidas a nuestros pieces?
No cabe duda cuál es la cualidad más codiciada por parte de los lectores de éste blog (al menos por varones allí presentes del otro lado de la pantalla).
Pero hay veces que el mundo desvaría...
hay veces en que la sed de justicia puede más que la hormona... ("dicen que un pelo de...")
hay veces en que uno siente que le cascotean el rancho...
hay veces que uno no está dispuesto a la sana competencia...
En esos momentos es necesario tener licencia para matar: cuando dos amigos crean sus blogs en estéreo y para colmo el blog del que uno más ansiaba sus post cierra, dan ganas de hacer justicia y volverse un poco James Blog.